Cuando decidimos incorporar aceites esenciales en nuestra vida, no lo hacemos “de golpe”, sino que vamos poco a poco probando qué nos sirve y qué nos gusta, lo mismo para nosotros que para nuestra familia! así sucedió en mi caso.  Comencé esta vida “aceitosa” por que mi amiga Mónica me “presentó” al aceite de clavo de Doterra, y desde ese día, no me he podido zafar!

Ahora, usamos aceites prácticamente en cada momento de nuestro día:

Al levantarnos: 

Como la dinámica de la escuela, uniformes, desayuno es una corredera, pongo en el difusor algún aceitito que mi hija escoja, casi siempre cheer, o balance.  Casi todo sucede entre las 6:30 y las 7:30 am que tenemos que salir a la escuela, aunque mis hijos se levantan muuuuy temprano, así que, al menos en casa, el estrés de despertar chamacos es inexistente.

En el desayuno:

Trato de preparar desayunos saludables diariamente, y esto me ha ayudado mucho a que mis hijos coman de todo.  Para la alimentación, me baso bastante en los planes de los retos de Sisy Garza, y con base en ellos hago mis compras de despensa los fines de semana, así que está más o menos todo planificado en cuanto a las comidas.  Aderezo la mayoría de sus desayunos con algún aceite esencial: si son frutas, las lavo con agua, vinagre y aceite esencial de limón, a veces coloco hierbabuena en el smoothie, a veces canela en la avena, etc.

Camino a la escuela:

A veces los llevo yo, a veces su papá.  Si se van conmigo, tengo un difusor en el coche, y ahí pongo un aceite que me dura toda la semana.  Casi siempre forgive o balance.  Mi hija es FAN FAN FAN del Forgive!

En el gimnasio:

Hay veces que paso directo de dejar niños en la escuela, al gimnasio, aquí tengo mi neceser con Jabón líquido, shampoo y acondicionador, TODOS 100% naturales infundidos con aceites esenciales.  Yo uso los de Doterra, que AMO con locura, y además los pago con puntos del programa de lealtad!

Saliendo de la regadera, rocío mis pies con un spray que traigo siempre preparado con agua y Melaleuca, para evitar infecciones.

Como perfume, suelo usar aceites esenciales. El favorito es Whisper de Doterra.  Uso un par de gotas directo en las muñecas, nuca y pecho.

En la oficina:

A lo largo del día, tomo agua, y le doy sabor con algún aceite cítrico: naranja, lima, limón, toronja…

Si tengo una junta o proyecto que me ocasiona mucha tensión:

Aplico Balance para estar más centrada, o Elevation, Passion o Motivate para estar más enfocada, y dar mi 100%

De regreso de la escuela:

En general, los niños vienen contentos, cuente y cuente lo que sucedió en el día. A veces mi bebé se duerme en el camino, usamos el mismo difusor que en la mañana.

Para la comida:

Igual seguimos un plan de alimentación balanceado, evitamos la fritanga, la comida chatarra, los dulces, etc.  Pero tratamos de que los platillos luzcan y sepan bien.  Para cocinar usamos algunos aceites como: limón, hierbabuena, albahaca, tomillo, romero, orégano, etc!

Durante la tarde:

Si es época de frío, coloco algunas tardes On Guard en difusor, para ayudar a apoyar su sistema inmunológico.  Si alguno está enfermo, griposo, mocoso, etc, aplicamos una mezcla que preparamos con limón, orégano, melaleuca e incienso, para matar los bichitos.

En la tarea:

Mi hija mayor trae tarea diariamente. No es gran cosa, una sola hoja.  Preparé una mezcla para la concentración que usamos de vez en cuando.

A la hora de dormir:

Ya tenemos la rutina fija: baño, cena, un ratito de “juegos tranquilos”, y se duerme el bebé, y luego se duerme la mayor.  Para dormir alternamos el difusor en sus cuartos, y ponemos mezclas para tranquilizar, o si tienen congestión, para respirar mejor

Quién hubiera pensado que iba yo a estar con toda esta dinámica tan rica hace unos años!!!

Y tu, ¿ya usas lo aceites esenciales en todas tus actividades?